Nuestra Rioja Alavesa es una de las regiones vinícolas más icónicas del territorio español y una visita obligada para los amantes del buen vino, la gastronomía y los paisajes fascinantes. Situada al sur del País Vasco, esta pequeña comarca enclavada entre la Sierra de Cantabria y el río Ebro, es la combinación perfecta entre tradición, historia, y belleza natural.
Pero, ¿de dónde surge esta tradición? La historia vitivinícola de Rioja Alavesa está muy ligada a su cultura, a sus tierras y a su identidad. Aunque algunos restos arqueológicos como los del Poblado de La Hoya muestran la existencia de asentamientos humanos y actividades agrícolas durante la Edad de Hierro, fueron los romanos los que, aprovechando su privilegiado clima y los suelos ricos en arcilla y caliza, trajeron a la región técnicas avanzadas de producción de vino.
Aunque en la Edad Media la viticultura seguía siendo tradicional, con pequeños viñedos que se gestionaban de manera manual, los monasterios desempeñaron en esta época un papel crucial, y sus nuevas técnicas de elaboración otorgaron a los vinos de la zona una sólida reputación. En los siglos XVI al XVIII, el vino de Rioja Alavesa ya se consolidaba como un producto de calidad y se exportaba a diferentes zonas de Europa a través del puerto de Bilbao.
Pero el gran giro llegó con la crisis del vino en Francia a causa de la plaga de la filoxera, un insecto que devastó los viñedos franceses en s. XIX. Como consecuencia, muchos viticultores franceses se trasladaron a España en busca de nuevos terrenos para cultivar, e implantaron en la comarca nuevas técnicas de vinificación, como el uso de barricas de roble para el envejecimiento del vino, una práctica que ha sido clave en la elaboración de los vinos de la región.
Fue entonces cuando comenzó el auge de las bodegas comerciales más organizadas y la profesionalización de la elaboración y del almacenamiento del vino, lo que permitió a los vinos de Rioja Alavesa ganar en calidad y aumentar su reconocimiento internacional. En 1925, el vino de Rioja Alavesa consiguió su Denominación de Origen.
En la segunda mitad del siglo XX, muchas bodegas familiares de Rioja Alavesa empezaron a ampliar su producción, con nuevos proyectos vitivinícolas que apostaban por la calidad. Hoy en día, Rioja Alavesa sigue siendo una de las principales zonas productoras de vino en España, con un gran número de bodegas que combinan en sus procesos tradición y modernidad, y que atraen a visitantes de todo el mundo para descubrir no solo su vinos, sino también su gastronomía, su cultura y su historia.
Bodegas como Eguren Ugarte, Viña Real, Solar de Samaniego, Baigorri o Casa Primicia, ofrecen al enoturista una experiencia completa donde además de conocer sus viñedos, su método de elaboración y su historia, puedes disfrutar de alta cocina en sus propias instalaciones.
Por eso hemos querido elaborar una mini guía para visitar Rioja Alavesa con algunas opciones para aprender, comer y beber.
GUÍA PARA APRENDER, COMER Y BEBER EN RIOJA ALAVESA
Bodega Eguren Ugarte (Laguardia)
Una bodega familiar, innovadora, autofinanciada e independiente, con 130 hectáreas de viñedo propio, un encantador hotel con vistas y el restaurante Martín Cendoya con una carta de cocina tradicional riojana que puedes combinar con su exquisita selección de vinos propios.
Bodega Viña Real (Elciego)
73 hectáreas de viñedos propios situados por encima de los 450 m de altitud y una impresionante bodega-restaurante diseñada por el arquitecto Philippe Mazieres donde disfrutar de un enoexperiencia completa.
Bodega Solar de Samaniego (Laguardia)
A los pies de la villa medieval de Laguardia, en el corazón de Rioja Alavesa se encuentra una de las principales bodegas de la comarca, un proyecto que nace de la histórica finca La Escobosa, propiedad vitícola de la familia de Félix María de Samaniego, célebre escritor de fábulas y oriundo de la villa de Laguardia, que ofrece una oferta enoturística muy especial.
Bodega Baigorri (Samaniego)
Una de las bodegas de Rioja Alavesa que apuesta por cultivos sostenibles de viñedos repartidos entre Samaniego y San Vicente de la Sonsierra. Con un restaurante con vistas a sus viñedos que ofrece un menú degustación con una cuidada presentación y creatividad, elaborado con productos de la tierra que maridan con sus propios vinos.
Bodega Casa Primicia (Laguardia)
Casa de la Primicia es el edificio civil más antiguo de la villa de Laguardia. Desde inicios del siglo XV la iglesia cobraba en este histórico edificio, el impuesto agrícola de los Diezmos y Primicias. En la actualidad, se puede disfrutar de una visita guiada para conocer la historia del vino de la comarca, almorzar en el edificio más antiguo de Laguardia o degustar una maravillosa parrillada al sarmiento en Carravalseca, un asombroso jardín entre viñedos protegido por la sierra de Cantabria.